Ryley de 8 años y su hermana Rylyn de 5 iban estaban comprando en un supermercado con su madre cuando de repente sucedió algo mágico. El cajero que les atendía se parecía terriblemente a Maui, uno de los personajes de la película Moana. Por supuesto no faltó el grito de Chee-hoo, característico del personaje. El vídeo tardo muy pocas horas en hacerse viral.