George se acercó a mi el primer día de grabación, miró mi vestido y me dijo "no puedes llevar un sujetador bajo ese vestido". Yo le respondí, "está bien, picaré, ¿por qué?". Y el me contestó "porque… no hay ropa interior en el espacio". Prometo que es verdad y lo dijo con muchísima convicción. Como si él hubiese estado en el espacio mirando y no hubiese visto ningún sujetador, bragas o calzoncillos por ninguna parte. Más adelante, en el espectáculo de Berkeley, vino a mi camerino y me explicó por qué no podía usar el sujetador en otras galaxias. Lo que ocurre es que, si vas al espacio, tu cuerpo pierde peso. Hasta aquí todo bien, ¿no? Pero luego tu cuerpo se expande, pero no tu sujetador, así que serías estrangulada por tu propio sujetador.