Gremlins es una obra de arte con una alineación estelar: Dirigida por Joe Dante, escrita por Chris Columbus y producida por Steven Spielberg. ¿Quién pensaría que un producto hecho por estos hombres debería ser censurado? Warner Bros, por supuesto. Un estudio que jamás logró ver la deliberada ambigüedad que presentaba la película: Si, es una comedia y sí hay espacio para el horror también. Cuando el guion de Gremlins llegó a Warner, ellos lo tenían claro: Tiene potencia para convertirse en una película familiar, lo que significa más dinero en recolección. Pero la visión del director era distinta; No quería que su película se desviara tanto hacia ese horizonte, si lo que quería era inquietar al espectador con algo de horror. Y para Dante una parte clave en ese sentido era el desarrollo de uno de sus personajes: Kate. La escena es pura descripción verbal. No hay nada de gore ni grotesco, pero sí un desgarrador relato de Kate mientras la cámara le daba un primer plano en todo momento. En ella explica porque odia la navidad.Cuando era niña, el padre de la pequeña Kate desapareció la víspera de noche buena. Llamaron a su oficina, fueron con la policía, pero el hombre nunca apareció. Después de varios días sin rastro de él, notaron en la chimenea de la casa un fétido olor, la familia esperaba que fuera un gato muerto o un pájaro, pero no. Era el padre de Kate, quien se quedó atrapado en la chimenea con un traje de Santa Claus. El hombre se metió desde fuera de la casa para darle la sorpresa a sus hijos, esperó demasiado, mientras el humo y poco aire del encierro le hizo perder el conocimiento. El hombre duró semanas muerto en su propia casa, sin que su familia siquiera lo supiera.Kate no malgasta detalles para describir tan macabro suceso que le marcó de por vida. Y para Dante, esta historia es crucial en el background de su personaje. Horrible pero fascinante, no podemos más que estar de acuerdo con Joe... ¿O piensas que fue demasiado?