El blockbuster por excelencia de este año ha sido Deadpool & Wolverine, sin duda alguna. Ahora, para ir directos y sin rollos: la película ha sido un éxito total, ha encantado a crítica y público por igual. Un trabajo impecable desde el inicio, con una fuerte campaña de marketing y un producto final que estuvo más que a la altura. Nos prometieron oro, y es lo que nos han dado, así de simple.