Recientemente ha surgido en internet el temor de que Ghost of Yotei sea un título con propaganda progresista como hemos visto en muchos otros juegos, e incluso fuera de la industria. Esta es una discusión que hace 10 años no existía, y lamentablemente vemos indicios para pensar lo peor aun con observaciones que no deberían significar nada más, nos dejamos llevar a veces, pero tememos tener la razón despues de cierto análisis. 

En el caso de Ghost of Yotei, todo surgió despues de saber que la protagonista sería una ronin mujer. Hasta ahí todo normal, es su propia historia y una protagonista mujer no necesariamente hace que un juego sea 'woke' (Vease The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom).

Motivos para temer

Pero despues de investigar un poco más a fondo, se descubrió la identidad de la actríz que da voz e imagen a nuestra protagonista, Erika Ishii, quien ha ejercido como activista de los derechos LGBT y ha tenido algun que otro encontronazo en redes con cierto sector que le atiza por esto mismo. En todo caso, las actividades de la actríz son temas personales que no deberían afectar su trabajo, dos campos completamente separados, ¿cierto? Sin embargo, es innegable que la contratación de la actríz se hizo por consultoría DEI (Diversidad, equidad e Inclusión); Ishii se considera no binaria, bisexual y pansexual. Volvemos al punto anterior, vida personal, para no asustarnos todavía...

Sin embargo hay otro indicio más preocupante: El jefe de diseño de juego es Eric Jensen, también activista progresista con pronombres en sus redes sociales. Por lo que son, por lo pronto, dos contrataciones DEI para el desarrollo del juego, y todo con menos de una semana desde su anuncio.

Sucker Punch Productions es una empresa estadounidense, por lo que las probabilidades de que este siendo asesorada por una de estas compañías se agiganta. Estas contrataciones empiezan a ser mucho más recurrentes en varios first-party de Sony.

Motivos para estar tranquilos

Por lo pronto, lo único que hemos visto del juego es un trailer y algunas descripciones bastante puntuales. La anterior entrega, Ghost of Tsushima, fue un título muy fiel a la cultura japonesa y comprometida a darnos un producto de calidad antes de colarnos algún mensaje político. Incluso entonces, en el juego se nos hizo presentación de un personaje bisexual, sin necesidad de que fuera propaganda, dándole prioridad al factor humano, antes de restregarnos en la cara temas de "empoderamiento", "visualización" u otras cosas, nada de eso.

Solo tenemos como indicio dentro del juego el cambio de género del protagonista, lo cual no es suficiente para usar la etiqueta de "woke". El cambio de personaje es de hecho una idea frescal, entendiendo varios factores como el largo lapso de tiempo entre un juego y otro y también la posibilidad de desarrollar a una protagonista femenina sin necesidad de caer en tópicos, hecho de la manera correcta.

Desde un punto de rigor histórico, Japón sí que tuvo guerreras femeninas de todo tipo en la época. Aunque incluso, sino fuera el caso, hablamos de una obra de ficción, y ademas original, donde no se adapta contenido de otras fuentes. Como sí ocurre en otros productos de entretenimento; personajes icónicos que cambian de género o raza sistematicamente. No es el caso de Ghost of Yotei.

Y sobre todo, lo más importante: Vivimos en épocas de paranoia, donde vemos fantasmas por todos lados. El juego aun no ha salido y es demasiado apresurado sacar conclusiones. La idea lamentablemente ya está plantada en el colectivo, y solo el producto final podrá corroborar o refutar esta reputación.

1 Comentario
daninudo

28 sep 2024, 22:28

Los idiotas piensan que no puede haber japonesas samurais pero se vuei peor cuando no saben distinguir entre actriz y personaje

Más noticias