Xiao Yun era una joven de 14 años que desapareció hace una década después de una fuerte discusión. Sus padres la daban por muerta. Durante los últimos días la policía china ha anunciado que ha encontrado a Yun en un cibercafé y que poseía documentación falsa para mantener su identidad. Al parecer,durante los últimos 10 años había estado durmiendo en estos establecimientos y trabajando como cajera para poder costearse comida y las partidas a CrossFire, su juego favorito. La policía la ha multado con 147€ por resistencia a la autoridad y se ha puesto en contacto con sus padres.