Análisis de todas las Megaevoluciones [ACTUALIZACIÓN]
Por juancuestajurado 28 ene 2018, 14:00Introducción
Muy buenas amigos de Vrutal, una vez más. Hace un año justo que se publicó mi primer artículo aquí, así que espero no haberos aburrido mucho durante este año. Esta vez no traigo nada nuevo sino una pequeña actualización a una serie de artículos que hice el año pasado en los que analizaba una por una cada Megaevolución. Aquí dejo el primero de la serie por si no tuviste la ocasión de leerlo. Más que nada para que veas si te convenzo o no te tragas lo que te digo:
Pues resulta que el año pasado no tuve en cuenta al hacerlo que en Sol y Luna se introdujeron descripciones de Pokédex también para las Megaevoluciones. No me juzguéis, SM llevaba poco tiempo y era algo que no podía prever.
Obviamente, no cambia nada de lo sustancial y hay muchas de las descripciones que no añaden nada nuevo, por lo que no pasé nada por alto. Sin embargo, hay otras que añaden matizaciones muy interesantes e incluso refuerzan aspectos del diseño que antes parecían menos relevantes. Y como con USUM llegan más descripciones de la Pokédex mejor para mí, así las meto todas en el mismo artículo.
Antes de empezar, pido perdón si la calidad de este artículo no es idónea, pero lamentablemente las circunstancias no son las que yo habría deseado. Os explico: lo ideal habría sido que me pusiera a escribir una bonita pero fría tarde, junto a la ventana (para ver los paisajes invernales) y con una taza de chocolate caliente a mi lado. Pero ya han quitado la decoración navideña y no la habría visto de todas formas porque vivo en un séptimo; además, en mi ciudad hace poco frío, tenemos la calefacción puesta y yo no soy muy friolero precisamente, así que estoy más bien sudando. Del chocolate pasamos porque ni sé hacerlo ni es correcto tras las comilonas de Navidad. Haré un esfuerzo hercúleo por vosotros.
Y lo primero es preguntarse, ¿qué ha cambiado de las Megaevoluciones en Sol y Luna?
Nada. No hay nada nuevo. Pero ojo, que no haya cambiado nada no significa que no se puedan decir cosas nuevas. Porque en Sol y Luna hay una nueva mecánica que irremediablemente se compara con las Megaevoluciones y nos hace verlas desde una nueva perspectiva: los movimientos-Z.
En un vistazo general diría que las Megaevoluciones han sido más explotadas en la saga y los movimientos-Z, solo en su juego. Desde que salió XY casi todos los spin-offs de Pokémon la han incluido y no como una simple mecánica, sino como lo máximo a lo que se puede aspirar y a menudo centralizando los objetivos y las acciones del jugador. Por otro lado, los movimientos-Z tienen un protagonismo mucho mayor en su propio juego (guían el recorrido del jugador y se habla de ellos constantemente) pero al final solo quedan como eso, una medallas místicas.
Además, los movimientos-Z siguen la misma pauta que las Megaevoluciones: parte de la energía del legendario de turno se desparrama por la región y le da un poder especial a ciertas piedras, que canalizan el poder de un Pokémon si hay afinidad con su entrenador. Solo que la de las Megaevoluciones es una energía misteriosa y casi mística alrededor de la cual surgen leyendas y los movimientos-Z son simplemente la luz de Necrozma irradiada por Alola y que afecta a todo lo no explicable por la ciencia que hay en la región (ultraentes, dominantes… todo está conectado de alguna forma, la luz de Necrozma es una especie de pegamento universal).
En resumen, que la mecánica de las Megaevoluciones es mucho más profunda y en retrospectiva se ve que estaba mucho más cuidada de lo que parecía; lo cual, por cierto, también traté en otro artículo aunque dentro de una teoría mayor.
También da mucho más juego, viendo que los movimientos-Z son solo un elemento de un concepto mucho más amplio mientras que las Megaevoluciones brillan por sí solas en cualquier juego. SM no añadió nada nuevo a la mecánica pero como he dicho, trajo las descripciones de la Pokédex. Y si la Pokédex de Alola se caracteriza por algo es por sus descripciones algo crudas. Por supuesto, las Megaevoluciones no son una excepción, así que comenzaré precisamente por aquellas que nos han mostrado un Pokémon que se vuelve más agresivo en su nueva forma.
Una pizca de maldad
No he tenido en cuenta casos como el de Pinsir, en los que tan solo es un poco más cruenta en la descripción (“ensarta a su enemigo y lo hace trizas”, no indica que sea más violento que de costumbre, solo expresa su forma de luchar de una forma más fuerte). Estoy hablando de Gengar, Gyarados, Tyranitar, Aerodactyl, Banette, Metagross, Garchomp, Lucario, Salamence e incluso Lopunny (en menor medida).
En algunos de estos Pokémon se habla de una agresividad ciega, que le lleva a atacar a cualquiera (como en Aerodacty o Gyarados, como era de esperar), incluso a su entrenador.
En el lado opuesto, se encuentran los Pokémon que muestran una faceta cruel e incluso sádica; por ejemplo, en Metagross se especifica que su inteligencia aumenta de forma desmedida, por lo que ataca a sus enemigos de forma atroz con total frialdad. También añade una modalidad de ataque desesperado en la que clava las garras a su rival y explota, todo sea por hacer el máximo daño posible. También tenemos a Lucario, el amigo de los niños. Un Pokémon con alma de justiciero que gracias a su Megaevolución se convierte en un luchador que domina el cuerpo y el espíritu. Pues no, puesto que (como ya adelantó el anime) se despierta en él un espíritu guerrero puro que le hace luchar de forma despiadada.
En un punto medio tenemos la situación de Banette y Gengar, de los que se dice que aumentan las ansias de causar dolor al resto de seres vivos. Acorde con su naturaleza de fantasma pero no por ello menos impactante.
¿Qué nos quiere decir todo esto? Que muchos Pokémon se vuelven agresivos (o incluso crueles) debido a los efectos de la Megaevolución. Francamente, un nuevo punto de vista más oscuro y escasamente tratado en Pokémon por motivos evidentes. Y que probablemente no veremos mucho más de aquí al futuro. Esto está muy relacionado con el siguiente aspecto del que os hablaré.
¿Me va a doler?
Un detalle que se repite constantemente en las descripciones de la Pokédex es el del sufrimiento. Aerodactyl, Scizor, Heracross, Houndoom, Manectric, Sableye, Sharpedo, Glalie, Garchomp y Salamence tratan esto de una forma u otra. Como podéis ver, muchos de esta lista coinciden con los del apartado anterior, ya que este sufrimiento es precisamente lo que hace que estos Pokémon actúen con una ira anormal.
No afecta a todos los Pokémon por igual: desde las simples agujetas de Heracross hasta el pobre Sharpedo, al que se le reabren las heridas de combates anteriores que habían dejado cicatriz, haciendo que le vuelvan a doler. En Salamence, Garchomp y Aerodactyl es más difuso, ya que comenta que un cambio sufrido en su cuerpo les irrita y frustra (no sé si esto es motivo suficiente como para querer destruirlo todo). Con Manectric simplemente dice que el exceso de energía le pone de mal humor, sin decir que sea más agresivo por ello.
De Sableye y Tyranitar no se especifica que les duela, pero si describe de forma tan gráfica que se les desgarra la piel o abre la espalda será por algo. Es similar al caso de Glalie, del que ya sabíamos que le estalla la mandíbula inferior; lo que se añade es que le causa la gran molestia de no poder comer y estar exhalando continuamente un aliento gélido (exceso de caramelos de menta, supongo).
Pero sin duda el caso más extremo es el de Scizor y Houndoom: se están derritiendo. Sí, el exceso de energía en su interior sale a través de ellos sin que puedan evitarlo, causando estragos en sus cuerpos. En el caso de Houndoom explica la habilidad Poder Solar (ataques más potentes a costa de sufrir daño colateral) y su cola partida. Scizor, por su parte, sufre mientras su exoesqueleto se derrite poco a poco, haciendo que cada vez le sea más difícil cargar con sus pesadas tenazas.
¿A qué quiero llegar con esto? Pues que la Megaevolución no es una bonita transformación de anime en la que el personaje quede igual pero pegue más fuerte y se mueva más rápido. La Megaevolución es una sobredosis de energía que provoca cambios en tu cuerpo y tiene unos efectos muy difíciles de soportar. Es un sacrificio que debe sufrirse para llegar a derrotar a todo el que se te ponga por delante, más al nivel de un pacto con fuerzas que no puedes comprender que el simple esfuerzo del entrenamiento. Así que chicos, lo de que solo la desencadenéis con Pokémon con los que teníais afinidad iba muy en serio. Si no te llevas muy bien con tu Pokémon es muy probable que acabe pasando de ti; y aunque la relación sea buena, si el Pokémon no está preparado para ese subidón de poder también podría acabar cegado por la ira y el sufrimiento y tengas que hacerte cargo de las facturas. Facturas de Centros Pokémon e indemnizaciones por daños y perjuicios en el mejor de los casos. Facturas de ataúdes en el peor, si es que las afrontas tú y no tus herederos. No intentes dominar la fuerza si no confías en que evitarás convertirte en Sith.
Pero no todo es sufrimiento físico y arruinar vidas. Algunas de las descripciones de la Pokédex muestran nuevos poderes que no se reflejan en el juego o nos dan nuevas pistas sobre el trasfondo de esa Megaevolución en concreto.
Cajón de sastre, no os voy a mentir
Por ejemplo tenemos el caso de Pinsir. Que sí, que lucha de forma un poco bestia, pero simplemente es que es muy intenso. Está en un constante estado de euforia debido a la alegría que le causa poder volar. Es bonito, es agradable, es un detalle simpático.
También es agradable saber que Slowbro está cómodo dentro de su Shellder gigante, ya que se siente completamente protegido. Que igual se les olvida el detalle de que no se entera de todo lo que duele porque es un poquitín lento, pero confiemos en la buena fe de Shellder.
Luego están Gengar y Alakazam, que obtienen respectivamente los poderes de viaje entre dimensiones y clarividencia (“solo con verlo, sabe todo sobre el pasado, presente y futuro de su adversario”). Que una cosa es una energía latente y otra son estos poderes místicos pero bueno, Pokémon no es muy dado a respetar las leyes de la física. Además, lo de Gengar ya se intuía desde Pokken y supongo que Alakazam habrá desarrollado tanto su inteligencia que haya llegado a ser suprema.
Otro Pokémon al que conocemos mejor ahora es a Kangaskhan: ver a su niñito combatiendo le llena de orgullo pero le recuerda que dentro de poco será capaz de valerse por sí mismo y no la necesitará más (aunque esto no se vea en los juegos). Una bonita metáfora sobre lo que siente una madre a ver que sus retoños dejan el nido, haciendo que ese amor incuestionable se parta por la mitad.
Terminaré con el que más me enamoró cuando empecé a reflexionar sobre su diseño y el que más me impactó al leer la Pokédex: Absol. Para quien no quiera leer el análisis que hice en su día: Absol es un Pokémon incomprendido, que trata de avisar a los humanos de desgracias que acontecen pero acaba rechazado, despreciado y temido porque se cree que causa dichas desgracias; su aspecto tras la Megaevolución es imponente y parece divino (con reminiscencias de un ángel), lo cual podría ayudar a que la gente vea que es un ser de naturaleza bondadosa. No causa las desgracias, sino que viene a avisarnos (como en la Biblia, un ángel avisó a José de que debía huir a Egipto para evitar una masacre). Incluso su cuerno pasa a tomar una forma más suave y deja de recordar a una guadaña (ya no es un ángel de la muerte o una parca). Pero el destino es cruel y parece empeñado en que Absol sufra ese estigma. Irradia una energía tan imponente que puede hacer que los más débiles de espíritu mueran de la impresión al ver su aspecto. Tal cual. Realmente está muy bien construido: no es de extrañar que a una persona con unas convicciones muy marcadas le dé un infarto al ver a un ser que parece una divinidad (tanto por aspecto como por el aura que desprende). Además, hace que Absol no pierda esa fama de sega-almas que tanto se esfuerza por dejar atrás. Para mí, la mejor y más profunda Megaevolución.
Bueno, no os quejaréis porque esta vez he sido mucho más breve que el año pasado (relativamente). Recapitulando: apenas ha habido nada nuevo, pero la comparación con los movimientos-Z ha hecho que la Megaevolución parezca un concepto más amplio de lo que parecía en un principio. También se añaden unas descripciones de Pokédex que individualmente parecen curiosidades o matizaciones, pero que en conjunto y con un esfuerzo inductivo dan más datos sobre el propio concepto de Megaevolución: es algo duro, capaz de causar mucha destrucción si no se controla a la perfección y con un toque místico que no podemos comprender.
