Estamos más que acostumbrados a que la gente se pase los juegos utilizando mandos de lo más inverosímiles. Lo que quizás no vemos tanto es que esto sucede en los torneos competitivos. Ha pasado en la DreamHack de Austin 2018. Un jugador conocido como Greg ha aparecido en un torneo de Dragon Ball FighterZ con un piano de Rock Band. Su habilidad era tan buena que derrotó a KH Black por 0-2 sin apenas despeinarse. A golpe de tecla. Finalmente fue derrotado por Chris G y quedó en el sexto lugar del torneo. Vale, no ha ganado pero tiene un mérito increíble. Los vídeo y las caras de sus rivales no tienen precio.