Tal parece que Ubisoft ha dado un paso en falso a la hora de elegir qué aspectos de Star Wars: Outlaws defender. Es innegable que el apartado visual del juego es una maravilla, ademas de la bien cuidada exploración. Pero lamentablemente está muy lejos de ser un juego perfecto; son temas de jugabilidad lo que más pegas le ponen a la experiencia. Y en este caso, hablaremos de la inteligencia artificial, pues los jugadores han descubierto una seria falencia en la inteligencia de los enemigos que descoloca al jugador por completo. Tanto es así que la comparación más dolorosa viene de la misma compañía, hace 11 años con Assassin's Creed: Black Flag, un juego que Ubisoft supo mimar, y que para muchos, marcó el final de la época dorada de la compañía.
En la comparación, observamos como nuestro personaje es acosado por los enemigos aun cuando este intenta esconderse bajo su mirada, lo cual es lo más lógico. Por otro lado, en Outlaws, tal parece que los enemigos sufren pérdida de memoria de corto plazo, pues el 'aggro' se pierde por completo una vez el jugador regresa a la hierba alta.
