Dragon Ball Sparking Zero! ya está a la orden del público y las primeras impresiones del juego son mayormente positivas. Pero la queja más recurrente al respecto tiene que ver con la dificultad de un enemigo que incluso en la misma saga animada demostró ser superior al protagonista: El Simio Gigante Vegeta. A pesar de ello, la dificultad de un enemigo tan formidable ha servido para imponer un reto colectivo en el que todos los que compraron el juego están involucrados; Vegeta Ozaru es el mayor filtro de jugadores que tiene Sparking Zero!, una condición que muchos ven con buenos ojos. Entre los comentarios más destacados sobre la dificultad, la mayoría hablan de la increíble resistencia a daños que tiene el personaje, una "esponja de puños" formidable. También destacan que, al tratarse de una segunda fase, el jugador ya viene mermado hasta dicho punto, sumado al hecho de que pelear contra el príncipe de los Saiyajin es una labor dificil en sí. El simio de Vegeta no da respiro ni siquiera al inicio de la batalla, el cual ataca inmediatamente despues de presionar Start. Algunos también creen que el enemigo tiene "cierta cantidad de dificultad artificial", al 'spamear' ataques unos tras otro que son imposibles de eludir. Uno de sus ataques más poderos es el de agarre, atrapa a nuesto Goku con sus dos manos (en el anime le rompe todos los huesos) y puede hacer 'insta kill' a nuestro personaje si no tenemos suficiente vida. Eventualmente la pelea ofrece la opción de bajar la dificultad tras cierta cantidad de 'game overs', aunque ese no es el estilo de un auténtico Saiyajin, ¿o sí?