Hideaki Nishino, director ejecutivo de PlayStation en Japón, ha dejado declaraciones que ha roto un par de burbujas en algunos fans. A pesar de tratarse de palabras que no deberían sorprendernos, se siente un aire de decepción de igual forma: La próxima PlayStation 5 Pro no será una consola de la próxima generación, ni en avance tecnológico ni en rendimiento final. Tanto es así eque el ejecutivo deja claro que "El proyecto de la PS5 Pro duró 5 años, incluso antes de lanzar la PS5 regular."
A pesar de que se aplaude su honestidad, los comentarios al rededor son referentes a el sentimiento de engaño por parte de los compradores: La PS5 Pro será la consola más cara de la historia, 800 Euros ¿Por qué debería un usuario hacer semejante gasto aun sin las garantías de que su precio se verá reflejado en nuestros juegos de forma justificada?