Un simple test de embarazo ya tiene la potencia suficiente para ejecutar videojuegos; suena raro, pero es lo que el aficionado @foone en Twitter ha descubierto con su última compra. Puede parecer demasiado complicado, y lo es; pero también es una muestra de cómo la tecnología está tocando todos los aspectos de nuestra vida. Hasta algo tan simple como una prueba química tiene un microcontrolador y una pantalla programable, y seguramente es cuestión de tiempo que veamos uno con conexión Bluetooth con nuestro móvil.

El verdadero desafío iba a estar en ejecutar juegos, y Foone no era optimista, pero al final lo consiguió. En efecto, el siguiente vídeo es el clásico Doom ejecutándose en un test de embarazo. De locos.

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