La cosa es que la adición a los videojuegos si existe y es una putada, pero es un tema complejo que los medios de comunicación no quieren entender porque para ellos los videojuegos son el enemigo.
Lo que hay que hacer es: Controlar que juegos para menores no contengan el dúo nefasto (Azar + Dinero real), limitar el tiempo de juego de los niños y evitar que si tienen problemas en el mundo real su único refugio sea el digital.
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