Fredrik Thylander, un diseñador que fue responsable de la lista de logros de Mirror's Edge, sostiene que los logros quitan recursos que podrían ser destinados a mejorar la calidad de los juegos. "Opinión impopular: los logros y trofeos han sido malos para los videojuegos. Limitan los juegos, interrumpen y desvían la atención, y consumen recursos que podrían haber mejorado los juegos"