ANÁLISIS: Vengeful Guardian Moonrider. De vuelta a una de las épocas doradas de los videojuegos
Por Anónimo 16 ene 2023, 16:00
Hace algunos años el estudio brasileño Joymasher nos sorprendió a todos lanzando Blazing Chrome, un título que homenajeaba a los clásicos como Contra. Si no lo recuerdas puedes leer el análisis que le dedicamos entrando en el siguiente enlace.
Ahora nos llegan Vengeful Guardian: Moonrider, un juego de acción y plataformas que en esta ocasión está inspirado en juegos como Ninja Gaiden o Shinobi. La fórmula funciona a la perfección. Estamos ante un juegazo que bebe de los mejores para ofrecernos una aventura divertidísima y llena de nostalgia.
El juego está ambientado en un futuro distópico en el que los gobiernos han creado supersoldados para controlar a la humanidad. Nosotros tomaremos el control de Moonrider, que busca venganza contra sus creadores y el resto de supersoldados.
En esencia tenemos un mapa general de 8 fases al más puro estilo Megaman. Cada una de ellas esconde un boss. No importa el orden y están repletas de midbosses y final bosses. Todas ellas tienen secretos y powerups con el que mejorar a nuestro personaje. El juego es MUY rejugable gracias a la configuración de mejoras y el poder completar los niveles con un rango.
En cuanto a las mejoras van desde un doble salto, recuperar salud cuando matamos a un enemigo, reducir el daño que recibimos a costa del rango, morir de un solo golpe o un radar que nos revela dónde se esconden los secretos en los niveles.
Es de agradecer la variedad de escenarios y las fases en moto en 3 dimensiones. Los escenarios son increíblemente bellos y reflejan a la perfección aquellos juegos de la época de 16 bits que nos enamoraron. Si eres de los que peinan canas es muy recomendable activar el filtro CRT que simula los televisores de tubo. Te sentirás como en casa.
La banda sonora te hará mover la cabeza y los pies al ritmo de la música. Está repleta de temazos y te mete de lleno en la acción.
Conclusiones
Vengeful Guardian: Moonrider es un homenaje a los Shinobi y Ninja Gaiden de la era de los 8 y 16 bits. Si viviste esa época vas a llorar de emoción y de nostalgia. Si eres más joven igualmente vas a disfrutar de un juego arcade divertido repleto de épica e intensidad. Ademá es bastante rejugable y te llevará unas cuantas horas conseguir el platino. Me muero de ganas de ver cuál es el siguiente paso de Joymasher. Que siga la racha porque estos juegos nos recuerdan lo fácil que es pasarlo bien y olvidarnos de cuestiones técnicas y de polémicas absurdas.
Nota: 8