El barcelonés Joan Namay 'Shanks', el jugador de videojuegos de lucha referente en España e integrante del club de esports Giants Gaming, afronta una nueva etapa en su exitosa trayectoria profesional. Shanks acude este fin de semana a Daytona (Estados Unidos) para competir en el CEO, uno de los grandes eventos internacionales del circuito de fighting games, y se probará por primera vez en Street Fighter 6, título de Capcom que acaba de salir al mercado y que promete revolucionar la escena competitiva mundial de los juegos de pelea.El catalán también seguirá participando en los torneos de Dragon Ball FighterZ, pero hará una transición gradual al Street Fighter, al que se dedicará por completo después del EVO, la cita por antonomasia para cualquier profesional de fighting games y en donde Shanks ya hizo historia en 2019 y en 2022 llevando a los esports españoles y Giants al nivel más alto que haya alcanzado cualquier player nacional.Hasta entonces, Shanks compaginará Street Fighter 6 y Dragon Ball FighterZ. En uno, busca seguir mejorando y hacerse un hueco entre los mejores; en otro, seguirá aspirando a la victoria y a conquistar trofeos, si así el parche no lo impide. "En este CEO, en lo que a Street Fighter 6 se refiere, voy principalmente a aprender y jugar todo lo posible. En Dragon Ball tendré una buena oportunidad de probar el parche de cara al EVO", declara. "Este 2 de junio salió el Street Fighter 6 y ya se venía cociendo que era el siguiente gran videojuego de lucha de la nueva generación. Ha causado un gran boom porque es una saga muy grande", señala.A la espera de otros títulos como Mortal Kombat, Tekken 8 o Project L, el esperadísimo videojuego de Riot Games, desarrolladora de League of Legends y Valorant, entre otros, los focos apuntan ahora al popular Street Fighter, un juego que ha marcado a multitud de generaciones desde los años 80, un imprescindible entonces en cualquier salón de recreativas. La saga vuelve liderar los fighting games con el lanzamiento de la sexta parte. En apenas tres días a la venta ya se habían distribuido más de un millón de copias. Todo un éxito. De hecho, el propio Shanks empezó su carrera participando en campeonatos de Street Fighter 4. No parte del todo desde cero, aunque hay diferencias notorias."Ahora mismo el Street Fighter es el videojuego más relevante, sobre todo por el circuito competitivo. Es el título a seguir, en el que todos se fijan, y es muy grande como para no darle a full. Podría ser el último año competitivo del Dragon Ball, así que lo veo como un paso natural", afirma Shanks. Desde hace una década Capcom ha ido puliendo un circuito de torneos tan interesante como atractivo para el jugador profesional, la Capcom Pro Tour, incluso con eventos que superan el millón de dólares en premios, como la Capcom Cup. La escena competitiva de DBFZ no iguala ahora mismo a la del Street Fighter, a juicio de Shanks y otros profesionales que con el paso del tiempo han ido decidiéndose por otras opciones. Hay ejemplos como WaWa, el último fenómeno del Dragon Ball Fighter Z y último campeón mundial. El joven francés ha dejado de participar a nivel profesional en DBFZ para dedicarse al Smash Ultimate y probarse en Street Fighter. "Capcom es toda una garantía con su circuito, ya sea online o presencial. Siempre se disputa, va de junio a febrero, y todos los jugadores apreciamos eso. En Dragon Ball faltan torneos", remata.El objetivo a corto plazo de Shanks es compaginar ambos juegos y, tras el EVO, aspirar a grandes torneos en Street Fighter. La competencia será máxima. "Va a ser el juego con más jugadores que se van a intentar dedicar a él profesionalmente. Está bastante difícil. Tengo una base, pero no jugué apenas al 5, sino al 4. El 6 es distinto y partimos todos desde la misma posición de salida. Llevará tiempo, llevará unos meses coger nivel", cuenta. La Capcom Pro Tour va desde regionales a internacional, por lo que esto dará margen al player de Giants para ir afinando y encontrando su juego. "Al estar limitado por regiones el objetivo no va a ser ganar el EVO y ser el número 1 indiscutible; lo primero es pelear por ser el primero de mi región, ganar puntos, ser el mejor de España y Portugal, y de ahí ir a la Capcom Cup. En la región España-Portugal además hay grandes rivales, como VegaPatch [ex jugador de Giants], por lo que hay que ir poco a poco", afirma. Aunque todo forme parte de la comunidad de videojuegos de lucha, pasar de los Goku y Vegeta a los Ryu y Ken no deja de ser un cambio. En cuanto a las diferencias entre uno y otro, Shanks señala el frenetismo, aunque no es lo único que distingue a ambos títulos. "SF6 es uno contra uno, DBFZ es tres contra tres. Eso ya es una diferencia. Hay más frenetismo en Dragon Ball. Pero me he dado cuenta de que el frenetismo de DBFZ me ha ayudado en el frenetismo del SF6. En este juego parece que menos es más, no puedes regalar mucho ni dar botones por dar, hay que ser paciente. El DBFZ es más exigente, pero no por difícil, sino por la cantidad de inputs que requiere uno y otro. Un combo en DBFZ tiene 30 golpes y en SF6 tiene cuatro o cinco, pero es con un timing complejo", detalla.Shanks ha vuelto al stick tras un tiempo jugando con mando debido a una lesión en el dedo. Un hecho, el del uso de otro equipo, que le impidió rendir al máximo nivel en algún momento. La vuelta al stick ayuda al regreso del mejor Shanks. "Hace ya tres años que me lesioné. En la rehabilitación me dijeron que, si consigo la forma de jugar sin que me moleste, puedo hacerlo sin problema. He vuelto al stick pero he puesto una pequeña almohadilla en el dedo lesionado. Sigo haciendo estiramientos y calentamiento. En el Street Fighter 4 usaba el stick y he descubierto que me ha ayudado a jugarlo en el 6, conservo mucha memoria muscular, movimientos aéreos... Puedo jugar sin problema", relata. Las Vegas acoge en agosto el EVO 2023. El EVO es la cita a la que todo jugador de videojuegos de lucha quiere acudir alguna vez. Por hacer un símil deportivo, son como los Juegos Olímpicos de los fighting games. Todo juego de pelea que se precie está en el EVO. En 2019 Shanks fue cuarto en Dragon Ball e hizo historia. Nunca un español había llegado tan lejos en un evento de tal calibre. En 2022, fue séptimo. El EVO ha sido clave para que el de Giants se haya convertido en toda una leyenda de los esports patrios.Será en el EVO donde Shanks haga su despedida oficial en Dragon Ball FighterZ. Cree el catalán que otros como Yasha, Kanye o Wade podrían seguir su camino. "Creo que todos estamos en una situación parecida, queremos hacer un buen cierre y dar el salto a otros juego. El EVO está ahí. Quiero ir al CEO, luego hay evento en Tenerife, y después al EVO para ganar y darle al juego la despedida que merece. Y seguir aprendiendo en Street Fighter", asegura.El último parche para el Dragon Ball FighterZ no enamora a Shanks, desde luego: "No me gusta mucho. Voy a seguir con mi equipo, Cell, Vegeta y Janemba, pero a Janemba lo han ‘nerfeado’ y tocado un poquito. A ver qué pasa en el CEO y ya veremos si introducimos cambios para el EVO. Entreno más offstream porque es difícil ya encontrar rivales online".Shanks fue segundo en el CEO de 2022 y le gustaría, como mínimo, repetir logro para ir diciendo adiós con honores al juego distribuido por Bandai Namco. "Muchos estarán ya con Street Fighter o guardándose para el EVO. Pero me veo bien, a lo mejor me ha faltado un poco de práctica con el nuevo parche, al menos he jugado contra otros ‘pro’ y he aprendido otros personajes aunque me habría gustado jugar más. Ya en el EVO será la última vez que coincidan todos los grandes de Dragon Ball", aventura Shanks, que ya avista al futuro en una nueva saga de videojuegos. Otra oportunidad para seguir agrandando su leyenda.