Según ha confirmado Sony en su informe financiero del último trimestre de 2023 (no estamos hablando del informe financiero del año fiscal 2023-2024, que llegará en abril), la compañía pasará por un periodo de "sequía" en el que no lanzarán "ningún juego nuevo de franquicia importante existente" hasta el próximo año fiscal, que comienza el 1 de abril de 2025. Con esto, Sony asume que "los ingresos en software se reducirán", pero esto aliviará el coste de las adquisiciones previas de la compañía y cerrará así el año fiscal en positivo.