os revendedores han visto su oportunidad de lujo y han aprovechado para hacerse con códigos del juego para poder revenderlos tal y como ha descubierto Garrus, un youtuber que se ha pasado por algunos marketplaces para ver cómo hay revendedores especulando con el precio de un juego que costaba 40 €... y que ahora se vende por unos 200 euros.